Hoy, 27 de octubre, conmemoramos el 61 aniversario de los Héroes y Mártires de Raiti-Bocay, una fecha que recuerda con profundo respeto y admiración la primera operación guerrillera del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN). Esta acción, conocida como la Gesta Heroica de Raiti-Bocay, marcó el inicio de la lucha armada contra la dictadura somocista, simbolizando el despertar de un pueblo decidido a liberar a Nicaragua de la opresión y el dominio extranjero.
Jorge Alberto Navarro, Francisco, Faustino Ruiz, Modesto Duarte Álvarez, Iván Sánchez Arguello, Mauricio Córdoba, Boanerges Santamaria y Varios Hermanos Misquitos, fueron los valientes combatientes que participaron en esta operación y ofrendaron sus vidas con la esperanza de un país más justo y soberano; sacrificio que encendió la llama de la Revolución Popular Sandinista que, años después, culminaría en la liberación del pueblo nicaragüense.

Raiti-Bocay no fue solo una acción militar, sino un verdadero punto de inflexión en la historia de Nicaragua, ya que simbolizó el despertar revolucionario y la voluntad inquebrantable de un pueblo decidido a liberarse de la opresión, lucha que trascendió las armas, convirtiéndose en un llamado a la conciencia nacional para forjar un futuro de justicia y libertad.
Hoy, al recordar la gesta heroica de Raiti-Bocay y a sus héroes y mártires, reafirmamos nuestro compromiso con la defensa de los ideales revolucionarios, pilares que han hecho posible el acceso a una educación universitaria gratuita como un derecho del pueblo. Este logro, fruto del legado de aquellos compañeros que ofrendaron su vida, nos recuerda que sus sacrificios transformaron nuestros sueños en oportunidades reales, convirtiendo lo que antes parecía inalcanzable en una realidad tangible para las nuevas generaciones.
Desde la UNAN-León seguimos honrando el legado de nuestros héroes y mártires, permaneciendo presentes y activos en la construcción de un modelo educativo inclusivo y transformador, que nos permite llevar la educación hasta los rincones más remotos de Nicaragua, asegurando que el acceso al conocimiento sea un derecho universal para todos y todas.